Colonia Caroya: POR MAYORÍA SE APROBÓ LA NUEVA URBANIZACIÓN
Con una histórica participación de vecinos a favor y en contra del proyecto, sesionaron los concejales caroyenses. Por cinco votos a favor y cuatro en contra se aprobó la ampliación de la zona urbana. Anoche marchaban a favor y en contra del proyecto aprobado por el Concejo.
Algunos, los que saben que hace 15 años se amaga con hacer
proyectos de planificación urbana en la ciudad, esperaban, hace dos o
tres meses, que la propuesta del Ejecutivo termine con un feliz y
armonioso acuerdo político.
Lejos de eso, la situación generó tanta polémica que agigantó las diferencias entre quienes piensan a favor y en contra.
Los Vecinos Autoconvocados, que llevan 56 días de reclamo, pedían
un proyecto consensuado, al notar los incesantes planteos de los
profesionales de la arquitectura e ingeniería sobre la idea de expandir
la zona urbana 200 hectáreas y hacer un boulevard de circunvalación.
Esta semana, aparecieron quienes están a favor de la iniciativa y
que, a modo de revanchismo, se burlaron de sus “rivales”, al obtener la
aprobación por parte del bloque oficialista.
Anoche, ambos grupos organizaron marchas a la misma hora y en el
mismo lugar, mientras el Concejo Deliberante terminaba de refrendar, en
la sesión ordinaria, el polémico proyecto con los cinco votos de la
mayoría y con la negativa de la oposición.
El pasado miércoles, tras el tratamiento en Comisión, la tensa
calma que había en el reclamo, se terminó de cortar y los asambleístas
descargaron toda su rabia en las redes sociales intentando movilizar al
pueblo a oponerse a la ampliación.
Los vecinos que pagan alquileres inaguantables para cualquier
bolsillo también se hicieron sentir presentando notas a los ediles y
pidiendo la extensión urbana pensando en poder adquirir terrenos a menor
precio que los del mercado actual.
El debate legislativo.
El debate del miércoles fue tan tenso que se ventilaron “trapitos” de lo que no se escucha en las comisiones.
La concejal Cecilia Della Casa (UCR) acusó a los opositores de pedir “cosas a cambio” de la aprobación.
María Josefina Ochoa pedía el cumplimiento de la Carta Orgánica Municipal y Adolfo Grión (Caroya para todos), pedía rever “la sentencia de muerte de la ciudad”.
Cristina Carnero se fundamentó en las personas que no tienen vivienda y tildó de “vergonzosa” la actitud de la minoría.
“No se olviden que son mayoría en el Concejo, pero no en el pueblo”, fue la frase de René Lepore (Frente Cívico) que irritó a los radicales.
Della Casa quería votar cada sector en particular, pero terminó
tratando sobre tablas el texto general, acusando a la oposición de
querer modificarla.
Así, en un clima de discusión política que se ramificó a la sociedad, se votó el proyecto.
¿Qué se aprobó?
El proyecto final propone el cambio de uso de suelo de rural a
urbano en tres sectores diferentes y alejados entre sí, pero todos en el
límite de la actual zona urbana:
- 30 Has entre calles 132, 128, 172 y 168 (Malabrigo).
- 18 Has entre calles 48, 124, Pedro Patat y 52 (IPV).
- 25 Has entre calles 40, 96, 14 y 18.
EL MENSAJE
Arq. Alejandro Romanutti.
“Este es un proyecto que
es un verdadero despropósito para el futuro de la ciudad. La vivienda
social no merece ser parte de esta desidia y falta total de criterio y
planificación a futuro. Implica una ciudad cada vez más inviable para
todos. Perjudica a los que menos tienen y engrosa los bolsillos de los
que más tienen. Obliga a quienes necesitan una vivienda a vivir en los
bordes, lejos de los equipamientos y aislados socialmente.
Si quienes están a cargo
del municipio no usan las herramientas adecuadas como para poder
construir viviendas dentro del radio urbano ya delimitado desde hace
mucho tiempo, es porque no les interesa en lo más mínimo dar una
solución verdadera, adecuada y sostenible en el tiempo.
Sólo se buscan los réditos inmediatos, como a casi toda la clase política de este país.
Y la ciudadanía siempre está atrapada en estecírculo vicioso e irresponsable”.
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