El precio del trigo disponible continuó aumentando y tocó los 655 dólares por tonelada en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), mientras persisten los temores que genera la falta de lluvias sobre las áreas trigueras para el desarrollo de los cultivos de la presente campaña.
En las pizarras del Matba, el valor de este cereal para su adquisición inmediata trepó un cuatro por ciento -es decir 25 dólares- respecto al precio que experimentó al cierre del viernes último en la plaza granaria.
Antecedentes
A enero de 2014, el trigo se negoció a futuro a un monto de 270 dólares por tonelada, cifra que mostró un alza del 2 por ciento contra el precio que obtuvo el viernes último en el Matba.
En el mercado granario de Rosario, se constataron nuevas subas en el precio del trigo a cuenta de un número mayor de ofertas, las cuales se sumaron a las que habitualmente se hacen en el mercado, hecho que impulsó el valor del cereal.
En la Bolsa de Comercio rosarina, la oferta para el trigo fue de 250 dólares la tonelada para el grano con descarga inmediata y diferida en diciembre.
Preocupación
Desde la Sociedad de Acopiadores de Granos de Córdoba, se expresó la preocupación del sector por la situación del "trigo apremiado por la seca y la falta de lluvias en el período de mayor demanda, que está definiendo una merma en los rindes".
Los acopiadores cordobeses refirieron además que el cereal que pude adquirirse en el orden local "se encuentra entre los más caros del mundo" y considero que el aumento en los precios "se debe a una prolongada sequía y heladas" que podría recortar -según informes privados- a poco más de 10 millones de toneladas.
En el sector privado siguen de cerca la situación de estos cultivos ya que las lluvias registradas hasta el momento siguen sin ser suficientes como para recomponer la situación de los trigales, que hasta la pasada semana cerca del 60 por ciento de los cuadros estaban en condiciones hídricas regulares a malas.
Las zonas más complicadas por la seca, según indicó el último informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, se constatan en el sur y centro de Santa Fe, sudeste de Córdoba y norte y oeste de la provincia de Buenos Aires.
Si bien, la sequía afecta a todos los cultivos, tal es el caso de las siembras que deben hacerse en el caso de maíz y soja, la falta de lluvias afecta fundamentalmente al caso del trigo, debido a que el agua resulta vital para el desarrollo de los cultivos.
Es por ello que las próximas dos semanas serán claves para definir la situación de los niveles de productividad que se obtendrán en los trigales del área agrícola nacional.
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