Tras los conflictos para exportar, McCain mudó su sede regional a Brasil
DESCABEZÓ LA CÚPULA LOCAL Y REEMPLAZÓ BUENOS AIRES POR SAN PABLO.-La fabricante de papas congeladas reorganizó sus negocios en el
Mercosur luego de haber sufrido, en 2012, problemas para vender su
producción en el país vecino
Tras haber sufrido, el año pasado, problemas para exportar su producción
a Brasil por los conflictos aduaneros entre ese país y la Argentina, el
grupo McCain Foods cambió su estructura organizativa en el país,
despidió al CEO local y trasladó la sede regional de Buenos Aires a San
Pablo.
La determinación fue tomada directamente por la casa matriz,
con sede en Canadá, y fue puesta en marcha desde noviembre de 2012, tres
meses después de que retomara sus ventas de papas fritas congeladas a
Brasil.
McCain Foods, es el líder mundial en producir este tipo de
alimentos, con una facturación de u$s 6.000 millones anuales. En
Argentina, posee una planta en la localidad bonaerense de Balcarce que
destina el 70% de lo que produce a abastecer a sus clientes de Brasil;
otro 20% al mercado interno, y el 10% restante a otros países de la
región, como Uruguay y Chile.
La fábrica tiene capacidad para
producir 27 toneladas por hora de papas de distinto tipo y es la
principal proveedora de ese producto en el país. Entre sus clientes se
encuentran McDonalds, Burger King y la brasileña Bobs.
Dicha
operación estaba a cargo de Adolfo López Rouger, quien hasta noviembre
fue el CEO de McCain en Argentina y manejaba la operación regional, que
precisamente incluye a Brasil, Colombia, México y el resto de la región.
Sin
embargo, la casa matriz decidió desplazarlo, intervenir la filial
designando para tal tarea a un directivo de apellido García Alvarado, y
despedir a otros funcionarios que estaban a cargo del management de la
planta de Balcarce.
Además se trasladó de la sede regional a San
Pablo y se nombró al empresario brasileño Paolo Picchi, como número uno.
Se trata de un ex alto ejecutivo de Danone Aguas, que ocupó importantes
posiciones en las filiales mexicana y argentina de ese segmento de
negocios de la multinacional francesa.
Desde este año, Picchi tiene
la trabajosa tarea de negociar con las autoridades brasileñas y
argentinas para evitar que futuros conflictos binacionales interfieran
en la actividad de McCain, tal como ocurrió con las trabas aduaneras que
el año pasado obligaron a la empresa a paralizar por varios meses sus
actividades y hasta a suspender a más de 300 de sus 700 trabajadores de
la planta de Balcarce.
Entre mayo y julio de 2012, Brasil frenó las
licencias de importación para una decena de productos perecederos
argentinos como manzanas, trigo, uvas pasas y papas. Lo hizo como
represalia a medidas similares aplicadas por Argentina.
Los
conflictos se sortearon tras una reunión mantenida en julio pasado por
los cancilleres de Brasil, Antonio Patriota, y Argentina, Héctor
Timerman, y a partir de ese momento la empresa retomó sus exportaciones
hacia el país vecino.
También hubo gestiones que llevaron a cabo el
secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y de Comercio
Exterior, Beatriz Paglieri, con las autoridades brasileñas.
Además,
la Organización Mundial de Comercio (OMC), estableció el año pasado para
que países que adoptan medidas unilaterales que perjudican a otras
naciones, levanten dichas restricciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario